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LLAMADOS, ESCOGIDOS Y FIELES

  • LA VERDAD EN YESHÚA
  • 23 nov 2018
  • 7 Min. de lectura

LLAMADOS, ESCOGIDOS Y FIELES

Apocalipsis 17:14

14 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.

Llamado, elegido y fiel son tres aspectos característicos de los creyentes en YESHÚA. La una es consecuencia de la otra y determina la posición de honor aquel gran día en que YESHÚA aparecerá a establecer su reino en la tierra. No se puede ser elegido, sin ser llamado y menos ser fiel sin ser llamado y escogido.

Se le ha dado muchas connotaciones a estas tres palabras, muchas veces de manera errónea y muy pocas veces se presentan armonizadas, dejando un vacío que inevitablemente no nos permite discernir la majestuosidad de las mismas. Estaremos abordando cada una con el propósito de tener una idea armónica y trabajar en ello con toda perseverancia.

LLAMADOS

En griego, la palabra traducida como “llamado” es kletos. Kletosa su vez está relacionada con el sustantivo klesis, que significa “un llamado” y se refiere “especialmente a la invitación de Dios para el hombre a aceptar los beneficios de la salvación (Diccionario expositivo del Antiguo y Nuevo Testamento de Vine, “Llamar, los llamados, llamado”). Esta palabra también es similar al equivalente griego de “iglesia”, ekklesia, que significa “llamado a salir”. En otras palabras, la Iglesia es el grupo de los llamados (invitados) por Dios.

El llamamiento proviene de Dios, y Él es el único que puede llamar (invitar) a alguien. Cristo mismo lo confirma en Juan 6:44 diciendo que “Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero”.

Mucho se ha especulado respecto a este pasaje, de si Dios hace acepción de personas para traerlas a CRISTO. El programa de redención abarca a toda la humanidad,

1 Timoteo 2: 5-6

5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,

6 el cual se dio a sí mismo en el mismo rescate en todos, de lo que se dio testimonio a su debido tiempo.

2 Corintios 5: 14-15

14 Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando en esto: que sí uno murió por todos, luego todos murieron;

15 y por todos murió, para que ya no vivan para sí.

Hebreos 2:9

9 Pero vemos a aquel que fue hecho un poco menor que los ángeles, a YESHÚA, coronado de gloria y de honra, a causa del padecimiento de la muerte, para que por la gracia de Dios gustase la muerte por todos.

Estos pasajes descartan la posibilidad de que YESHÚA murió para salvar un grupo selecto. El concepto de llamamiento antes aclara el asunto, EL PADRE hace la invitación para que todos se beneficien de la obra redentora de YESHÚA, sin embargo, no todos atienden esa invitación

2 Corintios 5:20-6:10

20 Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.

Cada vez que oímos que Cristo murió por nosotros es una invitación que Dios está haciendo a reconciliarse con EL. El detalle está en la aceptación o no de la invitación.

Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y HALLAREIS DESCANSO PARA VUESTRAS ALMAS. Porque mi yugo es fácil y mi carga ligera.

`He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo.

Y el Espíritu y la esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que desea, que tome gratuitamente del agua de la vida.

Tomando YESHÚA la palabra, les habló otra vez en parábolas, diciendo: El reino de los cielos puede compararse a un rey que hizo un banquete de bodas para su hijo. Y envió a sus siervos a llamar a los que habían sido invitados a las bodas, pero no quisieron venir.

Existen muchos pasajes que mencionan el llamamiento cristiano. Pablo, por ejemplo, describe a los destinatarios de su carta a los romanos como “llamados a ser de Jesucristo” y “amados de Dios, llamados a ser santos” (Romanos 1:6-7). Y en su carta a los corintios, el apóstol escribe: “Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor” (1 Corintios 1:9).

Además de llamarnos a la “comunión con su Hijo” —a tener una relación cercana con Él— Dios nos llama “de las tinieblas a su luz admirable” (1 Pedro 2:9).

De manera ingenua muchas veces reclamamos a Dios las situaciones desagradables que atravesamos, sin tomar en cuenta que EL continuamente está invitándonos a tomar gratuitamente del agua de vida, que va a facilitar su bendición en nuestras vidas. El desea darnos todas las cosas necesarias para vivir una vida satisfactoria, pero todo depende de nosotros, EL nunca nos va obligar a recibir las verdades que guiaran nuestra vida a la abundancia espiritual y material. Recibir la gracia de su obra redentora depende de nosotros, EL invita y nosotros decidimos si aceptamos o no esa invitación,

Cuando LAS SAGRADAS ESCRITURAS habla de los llamados, no se refiere a otra cosa que, a aquellas personas que han sido invitadas aceptar la obra redentora de YESHÚA y a disfrutar de los beneficios de las misma.

LOS ESCOGIDOS

La palabra griega traducida como “escogido” es eklektos, que significa “seleccionado, selecto” y también puede traducirse como “elegido” (Diccionario expositivo del Antiguo y Nuevo Testamento de Vine, “Elección, escoger, escogido”).

Aquellos que aceptan la invitación del PADRE a aceptar la salvación en YESHÚA y sus beneficios pasan a formar parte de un grupo selecto, y pasan a ser llamados hijos de DIOS, no todos pueden llamarse hijos de Dios, esa potestad es dada a aquellos que ha aceptado la invitación.

Juan 1:12-13

12 Más a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;

13 los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.

Aquellos que aceptan la invitación del PADRE, experimentan a través de EL ESPIRITU la regeneración de sus vidas, un nuevo nacimiento, pasan a ser una nueva criatura

2 Corintios 5:17-18

17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

18 Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación.

El ser escogido implica velar por la sanas enseñanzas de YESHÚA, permanecer firmes en ellas.

2 Tesalonicenses 2:13-15

13 Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad,

14 a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo.

15 Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra.

Aceptar la invitación tiene una grata consecuencia: la obra regeneradora conlleva a la obra santificadora por el ESPIRITU SANTO, EL tiene la misión de santificarnos en la medida que se lo permitamos. EL nos guiará a toda VERDAD para que estemos en conocimiento de cómo mantener nuestra posición de escogido. LA VERDAD se refiere a Las enseñanzas de YESHÚA las cuales son la revelación de la voluntad del PADRE, así que ellas nos permitirán mantener nuestra posición de escogidos o apartados para DIOS.

Efesios 1:13 agrega que “En Cristo también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa”

No basta con aceptar el maravilloso llamamiento de Dios y luego seguir viviendo como nos parezca. Ser escogidos implica ser obedientes a Dios, creer en lo que EL dice.

“elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas” (1 Pedro 1:2).

La obediencia es la verdadera demostración de nuestro amor por Cristo. Es el secreto para descubrir la voluntad de Dios en nuestra vida. Por ella algunos hombres fueron catalogados amigos de Dios. Quien ha sido invitado y se ha convertido en un elegido no hace nada por iniciativa propia, sus acciones están enmarcadas en lo dicho por YESHÚA, sabiendo las gratas consecuencias que conllevan confiar en EL.

Juan 14:

23 Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.

24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.

26 Más el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.

Algunas personas se muestran renuentes a confiar a Dios completamente sus vidas, temiendo que Él pueda cambiar sus planes. Confiar plenamente en DIOS, solo dará un resultado: todo te saldrá bien.

Guardad, pues, las palabras de este pacto y ponedlas en práctica, para que prosperéis en todo lo que hagáis.

LOS FIELES

“Fiel” proviene del griego pistos y puede significar dos cosas: “fiable, leal”, o bien “activo, que evidencia su creencia, confiado” (Diccionario expositivo del Antiguo y Nuevo Testamento de Vine, p. 402).

Mantengamos firme la profesión de nuestra esperanza sin vacilar, porque fiel es el que prometió;

`No temas lo que estás por sufrir. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

El que anda en mis estatutos y mis ordenanzas obrando fielmente, ése es justo; ciertamente vivirá --declara el Señor DIOS.

Doy gracias a Cristo Jesús nuestro Señor, que me ha fortalecido, porque me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio;

Orad sin cesar;

Palabra fiel es ésta: Que si morimos con El, también viviremos con El; si perseveramos, también reinaremos con El; si le negamos, Él también nos negará; si somos infieles, El permanece fiel, pues no puede negarse a sí mismo.

Que {todo} hombre nos considere de esta manera: como servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios. Ahora bien, además se requiere de los administradores que cada uno sea hallado fiel.

Su señor le dijo: ``Bien, siervo bueno y fiel; en lo poco fuiste fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor."

La fidelidad a Dios consiste en guardar, enseñar y poner en práctica sus enseñanzas, es la madurez espiritual en todo su esplendor. La fidelidad nos permitirá ser vestidos de lino fino, limpio y resplandeciente, en el preámbulo de las bodas del Cordero.

Fidelidad significa ser recto, fiel, de una sola línea, vertical, sin doblez, leal. Lo mínimo que Dios espera de nosotros, es que seamos fieles en todo lo que nos concierne, tanto en lo secular como en lo espiritual. La más alta exigencia a la que se ve sometido un cristiano es que sea fiel a Dios.

Ser llamados, escogidos y fieles nos hace intocables, preservados para reinar son EL, cuando establezca su reino en la tierra.

NOS VEMOS EN EL PREAMBULO DE LAS BODAS DEL CORDERO.


 
 
 

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